Trash es un perrito pequeño y dulce, de alrededor de un año, que ya ha vivido más soledad de la que cualquier perrito tan joven debería conocer. Fue encontrado abandonado en la calle — asustado, hambriento y sin saber si alguien volvería a preocuparse por él. No conocemos nada de su pasado ni quién lo dejó atrás. Pero, a pesar de todo, el corazón de Trash sigue lleno de amor. Es un perrito muy amistoso y divertido, que adora la atención y jugar con alegría. Le encantan las personas, las caricias y hacer reír con sus pequeñas travesuras. Pero el refugio no es un buen lugar para él. Intenta ser valiente, pero extraña el calor de un hogar real, la comodidad de un sofá suave y la sensación de tener a sus propios humanos. Trash necesita una familia que le muestre que ahora está a salvo. Sueña con personas que caminen con él, jueguen con él y le permitan acurrucarse a su lado al final del día. Merece cariño, seguridad y un hogar para siempre donde nunca vuelva a sentirse abandonado. Si buscas un compañero cariñoso, alegre y leal, Trash está listo para darte todo el amor de su pequeño corazón.